sábado, 30 de enero de 2010

TERTULIA NOSTALGICA
con Brisa Rossell y Pedro Mariscal.
Llegando un día a un cafe ecléctico en la tan concurrida colonia Condesa, con la lluvia molesta del sabado a medio dia, nos topamos con caras familiares y que tanto se extrañan, por aquellos no tan lejanos tiempos; la " cooperacion" como ahora aparece en lugar de costo o precio, me imagino seguro para evitar los pequeños impuestos de esta ciudad, es moderado para el lugar. Nos llevan por un corto pasillo atraves de cortinas y vemos un improvisado y bien logrado escenario con equipo de ilumación adecuada pero no necesaria en este momento se encuentra en medio de unos comodos sillones vintage y unas velas que no son velas.
Entra una mujer imponente y de cara familiar, comienza a cantar y entonces pienso, mmm seguro se esta esforzando jajaja y lo trato de tomar en serio cuando la mujer dice que la pena ajena es provocada, el hombre menudo y bien parecido toma el teclado y durante todo el momento tiene evidentemente la atencion de las mujeres del lugar....
Y comienzan los relatos que de inmediato uno trata de compararlo con algo o alguien conocido, pero se olvida y se disfruta la historia ajena ( en ocasiones), pues los relatos parecen ser tan conmovedores y NOSTALGICOS, y asi pasan los relatos y las canciones que nos traen recuerdos de antaño y para las generaciones mas antiguas seguro historias de su vida pasada, cada uno me da sensaciones diferentes, se enchina la piel y se rie diferente en cada uno.
A mi mente vienes esos recuerdos de algunas clases para poder contar un cuento apropiadamente y se ve la pasion de la mujer, que tiene en voz y cuerpo una imagen llena de colores y personajes parados justo entre nosotros, personajes e historias que se vuelven parte de los pensamientos que en lo personal tocan de manera especial. Son relatos poco escuchados en cualquier otro libro de cuentos, pues no parecen ficción y entonces uno entra en la duda si en verdad fueron reales jajaja hasta que un hombre tenga de su mujer que alguna vez fue un oso un pequeño osezno.
Y no queda más que el aprendizaje escondido en las palabras y la metáforas de estos relatos, un buen sábado que era molesto por la dudosa lluvia se torna especial y divertido, único y espero en sensacion repetible en mas ocasiones....
HOY VI QUE SE PUEDE LLEGAR LEJOS CON LA PASION!!

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